Al igual que con las personas, los gatos disminuyen su velocidad a medida que envejecen. Es posible que deseen hacer menos ejercicio, pueden comenzar a aumentar de peso y su personalidad puede cambiar. Algunos gatos se vuelven más amigables y quieren pasar más tiempo con sus dueños. Otros se vuelven más gruñones y no les gusta que los toquen. Muchos gatos duermen más y salen menos.
Sin embargo, los cambios en la personalidad pueden ser un signo de dolor o enfermedad, por lo que vale la pena consultar con su veterinario. No olvide que los gatos mayores aún necesitan una vacunación regular, un tratamiento antipulgas y antiparasitario.
¿Cómo afecta la vejez en los gatos?
El envejecimiento afecta la piel y se vuelve menos elástica. El pelaje pierde su brillo y pueden aparecer pelos blancos. La audición y la vista se deterioran y la memoria de su mascota puede verse afectada. Los patrones de sueño a menudo cambian ya que muchos gatos mayores duermen más, aunque algunos se despiertan por la noche.
Los músculos y los huesos se vuelven más débiles y el sistema inmunitario no funciona tan bien, por lo que tu gato se vuelve menos capaz de luchar contra una infección. Los órganos internos como el corazón, el hígado y los riñones pueden deteriorarse. Otros cambios hacen que la boca se seque y la alimentación puede ser más difícil.
Sin embargo, las mejoras en la medicina significan que hay tratamientos disponibles para ayudar a reducir los peores efectos de la vejez en gatos. La edad no es una razón para aceptar problemas de salud e incluso los gatos viejos pueden llevar vidas felices y activas. Mantener a tu gato mentalmente activo puede ayudar a que se sienta joven: pruebe juguetes nuevos, al igual que a los gatitos, a los gatos mayores les gusta jugar.
¿Cuando empiezan a envejecer los gatos?
En la actualidad, se considera que la edad media del envejecimiento de los gatos, comienza a los siete años para la mayoría de gatos.
Muchos veterinarios están empezando a proporcionar programas de «cuidado para gatos ancianos» y estos son dignos de consideración. Reconocer los cambios tempranos en su mascota permite un diagnóstico y tratamiento temprano y puede mejorar considerablemente la calidad de vida.
A medida que su gato envejece, es bueno proporcionar una caja de arena interior, incluso si su gato normalmente usa el baño al aire libre. Debido a que se vuelven más lentos, los gatos mayores pueden sentirse vulnerables afuera y proporcionarles un arenero interior ayudará a prevenir problemas al usar el baño. Las cajas de arena con lados bajos son las mejores a la hora de que los gatos mayores puedan entrar cómodamente.
Alimentar a un gato anciano
A lo largo de la vida de tu gato debes pesarle cada mes o cada dos meses. Si el peso aumenta constantemente después de los 12 meses de edad, debes comenzar a reducir la alimentación de tu gato. La pérdida de peso puede ser una señal temprana de enfermedad, así que consulte con su veterinario.
Es común que los gatos mayores desarrollen afecciones médicas que los hacen perder peso, como la enfermedad renal y tiroidea. Si su gato está perdiendo peso, es importante que consulte a su veterinario lo antes posible. Otros gatos aumentan su peso con facilidad a medida que se van haciendo mayores y es importante que esto se mantenga bajo control. Es poco probable que los gatos con sobrepeso vivan mucho tiempo y son propensos a sufrir enfermedades graves.
Si su gato está perdiendo peso, debe consultar a su veterinario en caso de que haya un problema médico subyacente y discutir si es aconsejable seguir una dieta para personas de la tercera edad. El veterinario puede sugerir alimentos especiales para gatos ancianos con pérdida de peso.
Aseo de un gato anciano
Si tu gato se ve descuidado o desarrolla pelaje enmarañado, ve al veterinario para un chequeo. Puede haber enfermedades dentales o problemas en las articulaciones que están afectando la capacidad de acicalarse. La preparación regular es importante para su gato.
Mantenga un control sobre las uñas de su minino. Los gatos más jóvenes a menudo no necesitan recortar sus uñas, pero una actividad reducida puede hacer que las garras crezcan demasiado. Haz que tu veterinario lo revise si no estás seguro.
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